martes, 10 de marzo de 2009

Dryocopus martius (Pito Negro)

DESCRIPCIÓN

Gruesa ave de 45 a 48 centímetros de longitud, de coloración negra con capirote rojo, incluidas frente y nuca. Pico blanco marfileño, algo grisáceo en la punta; patas grisáceas. Ojos blanco amarillento.La hembra, plumaje negro con mancha roja en la nuca y resto de la cabeza negro.
HÁBITAT

Bosques grandes y medianos, tanto de coníferas como de frondosas, especialmente en hayedos, pero también en pinares, abedulares, etc. En los bosques próximos al litoral, en Asturias, es más escaso. Generalmente nidifica en árboles viejos; en Cataluña en pino negro y bosques de abeto, haya y pino albar, entre los 900 y los 1600 metros.

COSTUMBRES

Su vuelo rectilíneo y el no cerrar las alas tras cada aletazo, le distingue de otros picos y recuerda al del Arrendajo.Se posa en árboles por los que trepa ágilmente, más o menos al estilo de los otros pájaros carpinteros. Son poco gregarios, encontrándose en solitario o en parejas.Su extraño tamborileo resuena en el mes de marzo; logra este ruido golpeando vigorosamente con su pico una rama seca. La cadencia del martilleo da la impresión de un redoble. Cuando el bosque tiene buena resonancia, el tamborileo puede oírse desde muy lejos, hasta a dos kilómetros de distancia. Esta manifestación sonora señala la presencia del ave ante sus congéneres.Muy arisco, se deja ver poco, descubriéndose la mayoría de las veces por su voz, por su grito agudo y chirriante, «crri-crri-crri», y por su resonante canto, «choc-choc-choc». En invierno se hace muy esquivo y silencioso; durante la noche suele ocultarse en el interior de viejos nidos, en agujeros de árboles.Construyen su nido en una cámara, con entrada estrecha y redondeada, excavada por el macho y la hembra en un árbol grande, forrado de menudas virutas mezcladas con arena fina. Pone, de abril a mayo, de 4 a 6 huevos blancos y brillantes. La incubación, realizada por ambos padres, dura unos 12 días. Los pollos, nidícolas, desnudos al nacer, con piel rosada, son alimentados por ambos padres y abandonan el nido tras unos 24 a 27 días.Se alimentan de insectos que captura en los árboles con su larga lengua, de hormigas, coleópteros y sus larvas; cerezas, semillas de coníferas y savia fresca de árboles.

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